Pan de Ajo y Queso Desgarrable

Introducción

El Pan de Ajo y Queso Desgarrable es una delicia irresistible que combina la suavidad del pan con el sabor intenso del ajo y el queso derretido. Ideal para compartir en reuniones o como acompañamiento en cualquier comida, este pan seguramente hará que todos quieran probarlo.

Ingredientes

  • 1 pan redondo grande (como un pan campesino o un pan sourdough)
  • 1/2 taza de mantequilla, derretida
  • 3 dientes de ajo, finamente picados
  • 1 cucharada de perejil fresco picado
  • 1 cucharada de cebollino fresco picado
  • 1 1/2 tazas de queso mozzarella rallado
  • 1/2 taza de queso parmesano rallado
  • Sal y pimienta al gusto

Instrucciones

  1. Preparación del Pan:
    • Precalienta el horno a 350°F (175°C).
    • Coloca el pan en una tabla de cortar y con un cuchillo de sierra, haz cortes en diagonal en el pan sin llegar al fondo, creando una cuadrícula de 1 pulgada.
  2. Preparación de la Mantequilla de Ajo:
    • En un tazón pequeño, mezcla la mantequilla derretida, el ajo picado, el perejil y el cebollino. Añade una pizca de sal y pimienta al gusto.
  3. Rellenar el Pan:
    • Con cuidado, separa los cortes del pan y usa un pincel de cocina o una cuchara para esparcir la mezcla de mantequilla de ajo en todos los cortes.
    • Rellena los espacios entre los cortes del pan con el queso mozzarella y el queso parmesano, asegurándote de distribuir uniformemente.
  4. Hornear:
    • Envuelve el pan relleno en papel aluminio y colócalo en una bandeja para hornear.
    • Hornea en el horno precalentado durante 15 minutos. Luego, abre el papel aluminio y hornea por otros 10 minutos, o hasta que el queso esté completamente derretido y el pan esté crujiente.
  5. Servir:
    • Retira el pan del horno y deja enfriar ligeramente antes de servir.
    • Sirve caliente y desgarrable, idealmente acompañado de una salsa para mojar, como marinara o una salsa de queso adicional.

Consejos:

  • Para una versión aún más sabrosa, puedes añadir ingredientes como tocino crujiente desmenuzado, jalapeños en rodajas o incluso champiñones salteados entre los cortes del pan antes de hornear.
  • Este pan es mejor cuando se sirve inmediatamente después de hornear, pero también se puede recalentar en el horno para recuperar su textura crujiente.